Obdulia
Álvarez Díaz, más conocida como “La
Busdonga”, ha pasado a la historia como una de las voces más
extraordinarias del rico patrimonio cultural ibérico y, sobre todo, de la
música y el canto asturiano en particular. La Busdonga (1896-1960) nació en Fuente la Plata (Oviedo), falleciendo
en Gijón tras una larga enfermedad.
Hija de
Miguel Álvarez y de Victoriana Díaz, con tan solo 14 años contrajo matrimonio
con Manolo “El Maño”, sobrenombre que responde a la destreza y habilidades
“mañas” que este tenía para el juego de las cartas. De esta forma, también
Obdulia será conocida entre sus vecinos de la época como “La Maña”. Tuvo seis hijos,
aunque uno de ellos muriera a muy corta edad.
Obdulia
se traslada a vivir a la localidad de Mieres, lugar donde sus padres poseían un
“chigre” (término asturiano que se le da al establecimiento donde se vende y se
bebe sidra). Sería allí donde comenzaría su carrera artística y se instalaría
hasta 1934.
Parece ser que dominaba muchos estilos de canto y
que su repertorio musical era sobradamente amplio: jotas, copla, pasodobles,
flamenco…, aunque sería por las "asturianadas” por lo que La Busdonga pasaría a la
historia de la memoria colectiva.
De su
madre (cantante, gaitera y tamborilera) se dice que heredó la voz, una
sensibilidad especial hacia la música y una afición por ella que mantendría el
resto de su vida. De su padre Miguel, “El Busdongo”, recibiría el apodo con que
sería conocida en todas partes.
Baldomero Fernández
(compositor, pianista y profesor de música)
Tras uno
de sus ingresos en el Hospital, La Busdonga conoce a una
persona que sería determinante para su vida artística: Baldomero Fernández,
músico y compositor asturiano, de vida triste y por desgracia breve.
Con él aprendió a
dominar la voz, a acoplarse a unos ciertos y determinados tiempos, a llevar
ritmo musical… y a realizar unos “filaos” impresionantes. El propio
Baldomero Fernández la acompañaría al piano en varias de sus creaciones
musicales (también fue compositor de “tonadas”), como podemos escuchar en este
“Al pasar el puertu”…
La Busdonga
grabó 6 discos (12 canciones) en Oviedo, entre los años 1925 y 1926.
Posteriormente lo haría también en Madrid y más tarde de nuevo en Oviedo,
siendo un total de 24 canciones las que componen su obra discográfica.
Además de sus grabaciones apareciendo como solista,
están las que son acompañadas por la gaita de su hermano Ángel Álvarez, donde
podemos escuchar auténticas joyas del “canto a son de gaita” (como popularmente
se conoce este género en Aragón).
También se
dice que Marcelo “El del Fresno” tocaría el instrumento para acompañar la voz
de Obdulia en algunas de sus “tonadas”.
Varios
conocedores de la obra de La
Busdonga afirman que la gaita de Marcelo aparece en el
siguiente “Los mineros del Fondón”…
La personalidad
de esta cantante ha servido como punto de referencia para las sucesivas
generaciones de la música tradicional asturiana. La popularidad de la artista
es notable entre sus paisanos, así, el Ayuntamiento de Oviedo acordó en 1998
concederle el nombre de "La
Busdonga" a una de las calles de la ciudad.
* Para
conocer mejor la historia de la “tonada asturiana” en la primera mitad del siglo XX, entre otras consultas, creo imprescindible
acercarse a la figura de Baldomero Fernández:
Baldomero
Fernández: “El padre de la tonada de autor”
* En
relación a este tema te invito a que conozcas “el canto a son de gaita” de Aragón
y la historia de uno de sus protagonistas más emblemáticos:
Simeón Serrate (solo
tienes que pinchar aquí).
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